Una de nuestras fuentes nos alertó sobre una persona vinculada a la ex Curtiembre Verona, quien aseguró ver a la intendenta de Cañada de Gómez dialogar dentro de un automóvil con uno de los propietarios de la misma, frente al galpón de la empresa, unos 10 días antes del inicio de la labor clandestina. Lo que despierta sospechas es si conocía el trabajo que se haría allí o si la mandataria le habría dado el visto bueno a las actividades ilícitas de la Ex Verona.
Por Emanuel N. Soverchia
Uno de los hombres allegados a la ex empresa, que por razones de seguridad no revelaremos su identidad; reveló información sumamente contundente y precisa sobre algunas actitudes y acciones de la intendentita municipal cañadense, tan sólo a pocos días de comenzar la Ex Verona con los trabajos ilegales del salar de cueros dentro del Galpón ubicado en la zona sur de nuestra ciudad.
ORIGEN Y DESTINO DE LOS CUEROS
Según nuestro informante los cueros crudos llegaban en camiones desde la ciudad de Rosario, aparentemente proveniente de la empresa frigorífica “Swuift”; una vez depositados en el Galpón de la Ex Verona un grupo de empleados comenzaban con las “limpieza” y salado de unos mil cueros diarios para luego enviarlos a la curtiembre ubicada en calle La Plata, en la zona norte de nuestra ciudad; pero esta tarea fue interrumpida por las denuncias, clausuras y decomiso del material. Lo que determinó que los cueros en estado de putrefacción sean reubicados en un relleno sanatorio de la localidad de Pérez. Desde el inicio de estas clandestinas actividad solo duró aproximadamente una semana y media.
Un dato que dejó un alerta en nuestra investigación fue que los residuos que debían ser desechado integrados con sangre, sal, grasa animal entres compuestos, iban a ser vertidos al cauce del Arroyo por el conducto que puede verse abierto detrás del Galpón de la ex curtiembre, sobre calle Sáenz Peña; esa tuvo era utilizado como volcamiento de desechos químicos en plena auge de la Ex curtiembre Verona, años atrás. Sin embargo, los desechos actuales del improvisado salar nunca fueron a las aguas del arroyo local ya que no alcanzaron a trabajar los procesos de decantación de los piletones ubicados dentro del galpón.
EL ROL DE LA INTENDENTA
La fuente que nos brindó la información nos contó haber visto a la Dra. Stella Clerici dialogando con Rafael Jiménez (propietario del predio de la EX Curtiembre) en un vehículo a metros del galpón unos 10 días antes del comienzo de las actividades ilícitas que llevó a la clausura, allanamientos y decomiso de todo lo vinculado al salar que laboraba dentro de la empresa clandestina.
Según el relato del informante, Jiménez al terminar la charla con la mandataria local se bajó del automóvil donde también se encontraba Clerici y ésta abandonó el lugar conduciendo; mientras que el dueño de la Ex Verona, entró al Galpón para dar comitivas a uno de sus encargados para comenzar con la remodelación de la estructura de desamparado y precario Galpón.
La orden habría sido empezar a pintar las estructuras metálicas, reordenar y poner en condiciones algunas dependencias edilicias para que en pocos días después de esa charla con la autoridad máxima del gobierno municipal, los camiones que traían los cueros comiencen a llegar y se dé el nacimiento del ilegal emprendimiento. Jiménez habría designado a los encargados de los trabajos, pero el descubrimiento del emprendimiento ilegal obstruyó todo proyecto. Los únicos trabajados de reacondicionamiento que se realizaron en ese lugar fueron la conexión de un conducto de agua corriente para abastecer el trabajo del salar y algunas estructuras de hierro.
¿Qué hacía la Intendenta Clerici hablando con el dueño de la Ex Curtiembre en un auto frente al Galpón una semana antes de que comenzaran los trabajados de los salares de cueros?
¿No es sospechoso que nadie advirtiera semejante tarea en ese gigante Galpón en medio de la ciudad entrando y saliendo camiones a toda hora?
¿Había un visto bueno del gobierno municipal para realizar esa tarea clandestina?
¿Si Clerici estaba con el propietario de la Ex Verona frente al Galpón eso demostraría algún vínculo o acuerdo entre esas partes?
EL ESTADO EDILICIO DEL GALPÓN
El Galpón donde antaño funcionó la Curtiembre Verona ubicada en la intersección de calles Atlántico y Oncativo en la zona sur de Cañada de Gómez, hoy se encuentra en estado de abandono, y sus estructuras en riesgo de derrumbe.
En el trayecto de calle Concepción sobre la llamada obra del Túnel de Moreno; el inmenso Galpón se encuentra en estado crítico, ya que según profesionales esa estructura cuenta con cimientos rectos, haciendo que el Galpón comience a ceder, deformando las columnas de hierro que sostienen la cabreada, lo que puede verse desde la vía pública, es evidente el torcimiento de estas columnas. Además en otras partes del Galpón debieron colocarle soportes de hormigón para que continuara las grietas (en el centro de la estructura edilicia).
Según trascendió la idea inicial era demoler el Galpón, al menos una parte y dejar en pie, las dependencias donde años atrás funcionaron oficinas y salón comedor de la empresa; aunque hoy todo quedó en la nada; y despertando aún más dudas sobre lo que se quiere o se quiso hacer allí.
¿LA VUELTA DE UNA CURTIEMBRE?
Otro dato que nos llamó la atención fue la coincidencia de varias aristas que llevan a un mismo denominador común; trabajos de salares y curtiembres. Esto es a consecuencia que en los últimos días y durante la semana que aconteció el descubrimiento, denuncia, allanamientos, decomiso y clausura de la Ex Verona, en las instalaciones de la Curtiembre ubicada sobre calle La Plata comenzaron en paralelo una especie de reacondionamiento de las estructuras edicilias; y según los vecinos del lugar, también comenzaron a verse entradas y salidas de camiones y movimientos de obreros y materiales. Todas estas acciones en diferentes puntos de la ciudad, todas referidas a trabajos de cueros; además hace días fue descubierta una serie de documentos que pertenecen al archivo oficial de la Municipalidad de Cañada de Gómez entre los que se encontró un exhaustivo informe dirigido y realizado por profesionales para evaluar la calidad del agua del arroyo de Cañada de Gómez en el año 1993, acompañado de pruebas fotográficas y fílmicas se detallan los resultados analíticos de un laboratorio bioquímico de Rosario, como resultados de la extrema contaminación de la Ex Curtiembre Verona y otras empresas; hace que el manto de sospechas sobre una organización detrás del curado y curtido de cueros en la ciudad es inminente. A lo que se suma, ese supuesto vínculo del gobierno municipal con Rafael Jiménez una semana anticipada al inicio de la labor de salares.
Está por sobreentendido que luego de este articulo el gobierno municipal como las autoridades de la ex Verona no van a reconocer ese encuentro frente al Galpón; y si se hicieran eco de esta revelación seguramente será desmentida con argumentos y artilugios instrumentados para su conveniencia; sino acuden a su ya estrategia reconocida de llamarse a silencio e intentar desacreditar al periodismo libre por mecanismos anónimos como ya es su costumbre. Y esperemos que utilicen los recursos de la democracia y su derecho a replicas para aclarar o dar su versión de los hechos y no recurrir a los aprietes o amenazas, como valor inmoral de poder.