Cañadense perdió su trabajo durante la pandemia, cobró el IFE y lo usó para capacitarse y emprender su propio negocio

Su nombre es Sabrina González, es una cañadense de 23 años de edad, madre soltera como ella misma se define. Perdió su trabajo tras el impacto del coronavirus; pero nunca bajó los brazos. Cobró el Ingreso Familiar de Emergencia pero lo invirtió para capacitarse y montar su nuevo emprendimiento: “Mima tus Cejas”. La protagonista de esta historia nos relata su vivencia.

-¿Cuál es el desencadenante de tu destacable historia?

 -S.G.: Cómo todos sabemos estamos atravesando una situación complicada, donde muchas personas perdieron su trabajo, donde se lucha día a día para llevar comida a su casa. Yo soy una de esas personas la cual perdió su empleo, pero eso no me saco las ganas de seguir luchando, como trabajo en negro, cobro la Asignación Universal por Hijo (AUH). Este último tiempo que empezaron con la Ayuda INGRESÓ FAMILIAR DE EMERGENCIA (IFE), empecé a pensar cómo podría hacer para utilizar ese dinero, porque las ventas de mi trabajo disminuyeron y porque sabía que fui la última en entrar (a trabajar), pasé noches pensando porque es desesperante levantarte y que no tengas que ir a trabajar, cuando las cuentas no paran de llegar, cuando pagas un alquiler y cuando sos madre soltera.

-¿Qué pasó en ese momento?

 -S.G.: Pensaba en que invertir, que podría funcionar, que necesita Cañada, que busca la gente, que es lo que sé hacer y qué es lo que me gusta. Hasta que mi mamá me dijo. “hija no me hiciste más las cejas”. Como verás, las mujeres somos compinches con sus madres y nos gusta arreglarlas y verlas así. Fue lo que necesitaba en ese momento escuchar. Mi labor siempre fue atención al público me crié adentro de un negocio desde los 7 años de edad y desde ese momento, amo atender a las personas, ganarme el cariño y el respeto de mis clientes; que me saluden con un “buen día” , y que me pregunten “¿cómo estás?” Eso se gana en un cliente; no se compra. Trabaje todos estos años en esa labor.

-¿Y qué papel juega la pandemia en este caso?

 -S.G.: El 28 de septiembre le da positivo a mi pareja, la cual nos aislaron en casa bajo indicaciones el 02/ 10 llegó el resultado dando positivo. Él se sentía mareado con nauseas pero estaba dentro de todo bien, nada para alarmar. Yo en ningún momento tuve algún síntoma, me sentía bien y solo quería pensar en qué hacer para ayudarnos económicamente.

-¿Qué decidiste hacer ante esa situación  

 -S.G.: A la madrugada navegando por internet, porque no podía dormir, me encuentro con un anuncio que me lleva a cursos online. Di con el curso que estaba buscando: Perfilado, alisado y tinte de cejas. Enseguida pedí información y me pasaron un código para pagar, pensaba y ¿si es una estafa? Hasta que busqué sus publicaciones, sus características, sus comentarios y vi todo muy bien. Lo pagué; AGARRÉ LA PLATA INGRESO FAMILIAR DE EMERGENCIA Y SIN PENSARLO LO PAGUÉ. Aunque no podía salir, utilicé la tarjeta de la asignación y lo pagué; cuando me llegó toda la información del curso no lo podía creer. Se hicieron 7 a.m parecía una loca sin dormir leyendo y mirando videos de orientación y práctica.

-¿Qué sucedió con el curso?

 -S.G.: El viernes terminé el curso y empecé a ver y buscar precio de lo que necesita para empezar. Solo contaba con milagrosos 10 mil pesos. ¿Saben qué? El que no arriesga no gana. ¿Y si ahora me preguntan quién soy? Una emprendedora. Decidí a lanzarme plenamente al mundo del emprendimiento. Siempre me gusto la atención al público desde los 7 años de edad, quedé embarazada muy joven y tuve muchos tropiezos, pero eso no me sacó las ganas de seguir.

-¿Cómo estabas antes de todo esto?

 -S.G.: Harta de tener que pasar largos días y jornadas de trabajo y lejos de mis hijos, tuve claro que no sería igual y que debía pelear por ellos. Algún día recuperaría de alguna manera el tiempo perdido. Siempre miro el lado profesional de cada trabajo, ¿Cómo empezar? ¿Qué hacer? ¿Cuánto me costará?.  Esto que elegí me llevaría tiempo y, dedicación, te cuento a vos qué estás del otro lado de la pantalla que soy una persona como vos, con ganas de salir adelante y que yo no bajé los brazos, este tiempo en el que estamos es donde más necesitamos apoyarnos. Estudié con ellos, me gradué con ellos, me capacité y acá estoy brindándote un nuevo espacio para que no solo luzcas tus cejas bellas sino para que veas que con sacrificio todo se puede Y si hay algo que aprendí de mi mamá es que ninguna guerrera se da por vencida.

-¿Y ahora como te sentís?

 -S.G.: Feliz súper entusiasmada, no pensé que iba a tener recompensa tan rápido. Gracias a dios hoy tuve dos clientas y mañana tengo 3 turnos y para el viernes 3 turnos también. No es mucho pero es lo que buscaba estar tiempo con mis hijos en mi casa y trabajar para ayudar con los gastos .

-¿Qué más te gustaría contarnos?

 -S.G.: Primero quiero agradecer a mi novio que me apoyó desde el día uno, a mi mamá y mi familia que me ayudaron consiguiéndome las cosas y dejándomelas afuera para que yo vaya organizando mi lugar. Y no busco reconocimiento por esto, busco que las personas vean mis ganas de salir adelante, que me apoyen porque quizás hoy lo tengan todo pero mañana ¿quién sabe? Que me tomen como ejemplo y que dejen de meternos a todos en la misma bolsa. Yo no me compré un celular, me compré mis herramientas para empezar a trabajar.

-Con el dinero además de pagarte el curso ¿Qué herramientas compraste para tu emprendimiento?

 -S.G.: Compré mi kit de perfilado completo que son todos los materiales que necesito, lo demás se puede conseguir o se puede hacer. La camilla me la prestó mi tía y mis pinzas son un regalo de cumpleaños de mi novio y así con poco se empieza. Antes de despedirme quiero mostrarle cómo quedó mi lugar y dejarles mi número de contacto para la persona que le interese arreglarse sus cejas, con mucho gusto esta bienvenida.

-¿Cuál es el nombre que elegiste para tu negocio?

 -S.G.: Se llama “MIMA TUS CEJAS”, ya tengo una página principal que es Instagram @mimatuscejas.