La CAB se fundó en 2011 y sus miembros lideran áreas de negocio de la industria biotecnológica múltiples y variadas. Su objetivo es contribuir a afianzar un modelo público-privado que incorpore sinérgicamente las necesidades estratégicas del país, las empresas y la sociedad en su conjunto.
Por ese motivo, una de las principales estrategias de la CAB es la cooperación con organismos e instituciones nacionales e internacionales que apoyen proactivamente el desarrollo y fortalecimiento de la biotecnología. Argentina presenta numerosas ventajas comparativas por sus recursos naturales, humanos y científicos. La CAB busca potenciar ese rol de liderazgo en biotecnología a nivel regional contribuyendo a la coordinación de un trabajo conjunto valioso, entre actores de diversos sectores, con el objetivo de fortalecer el posicionamiento del país en este campo.
El objetivo es crear un marco de trabajo productivo e innovador para promover los emprendimientos biotecnológicos desde una mirada global, que incluya desde la investigación hasta la producción, así como la comercialización y exportación de productos biotecnológicos con valor agregado.